Ségolene Royal, la ministra de ecología de Francia, se ha dirigido a las personas que consumen Nutella. Esto se debe exclusivamente al hecho de que para producirlo extraen el aceite del árbol palma de avellana, influyendo considerablemente y en gran medida a la desforestación mundial.
Lamentable en muchos lugares han acabado con grandes extensiones de bosques y otros cultivos para sembrar árboles de palma, asegurándose de tener grandes extensiones de esta planta para poder extraer su aceite y producir una buena cantidad de Nutella.
A pesar de que muchos bosques los han reemplazado por palmas de aceite, han destruido muchas áreas naturales y flora típica. A su vez, se ha hecho muy notable la manera que ha sido afectado el medio ambiente.
En una entrevista hecha a Royal, sugiere la necesidad de replantar árboles para poder detener la gran deforestación que se ha hecho en distintas zonas.
Es necesario crear nuevos bosques, ya que de lo contrario todo este caos seguirá ocasionando calentamiento global.
Royal recomienda a las personas dejar de comer Nutella ya que su ingrediente principal es el aceite de palma.
Además de causar la desforestación mediante su extracción, este aceite debe pasar por varios procesos para lograr refinarlo y darle la textura necesaria.
Las temperaturas que son utilizadas en este aceite destruyen sus nutrientes y libera toxinas llenas de grasas saturadas y además las toxinas podrían producir cáncer.
Por estas razones Royal recomienda hacer cambios en los ingredientes de Nutella.
Ferrero es una gran empresa de chocolates Italiano, y es quien produce Nutella. Esta empresa ha sufrido un sin fin de cuestionamientos después de la entrevista hecha a Royal, y sin embargo, respondieron con un comunicado expresando que estaban en conocimiento de lo que estaba ocurriendo con el medio ambiente, y después de realizar extensas justificaciones, asumieron el compromiso de adquirir el aceite de palma con mayor responsabilidad.
El 80% del aceite de palma que logra conseguir Ferrero es de Malasia, además de contar también con el que les envían desde Papua, Nueva Guinea, Indonesia y Brasil.
Los senadores franceses, preocupados por el impacto ecológico que se produce al medio ambiente, tratan de exigir un impuesto del 300% a dicha compañía para subsanar tantos daños hechos al planeta, pero esta medida no fue aceptada, por lo que aún analizan la manera de controlar el daño ecológico que se sigue causando al planeta.